El 17 de septiembre de 1967, The Doors, liderados por el enigmático Jim Morrison, realizaron una de las actuaciones más controvertidas y memorables en la historia de la televisión estadounidense. Su presentación en el famoso Ed Sullivan Show no solo los catapultó al estrellato, sino que también los prohibió de futuros programas debido a su desafío abierto a las normas de censura del momento. En este artículo, exploramos los detalles de esa noche, el impacto de su actuación y el legado que dejó para la historia del rock.

El contexto histórico:

En 1967, The Doors ya eran una banda con gran notoriedad, gracias al éxito de su sencillo “Light My Fire”, que se había convertido en su primer número uno en las listas de popularidad. El Ed Sullivan Show era el programa de variedades más importante de la televisión, conocido por lanzar las carreras de gigantes como Elvis Presley y The Beatles. Para The Doors, esta era una oportunidad dorada de consolidar su éxito frente a millones de espectadores en todo el país.

Sin embargo, el conflicto entre la contracultura que The Doors representaba y el conservadurismo de la televisión se haría evidente esa misma noche.

La controversia:

Durante los ensayos previos al show, los productores pidieron a la banda que modificara una línea en “Light My Fire” que decía: “Girl, we couldn’t get much higher”, ya que consideraban que hacía referencia a las drogas. Aparentemente, Jim Morrison y la banda accedieron a cambiarla por algo menos sugestivo, pero durante la actuación en vivo, Morrison decidió ignorar la advertencia y cantó la versión original de la canción, tal como estaba escrita.

La reacción fue inmediata. El propio Ed Sullivan, quien no solía aparecer al final de cada actuación para estrechar la mano de los artistas como era costumbre, se negó a hacerlo. Poco después, un productor le dijo a la banda que nunca volverían a ser invitados al programa. A lo que Morrison, con su característico aire de rebeldía, respondió: “Hey, man, we just did the Sullivan show” (Ya hicimos el show de Sullivan, amigo).

Las canciones y la actuación:

The Doors interpretaron dos canciones esa noche: “People Are Strange” y su famoso éxito “Light My Fire”. Si bien la primera pasó sin mayor controversia, fue en la segunda donde todo estalló. La banda entregó una interpretación sólida, pero el enfoque del público y los medios se centró en el desafío de Morrison. El guitarrista Robby Krieger, incluso, sonríe justo después de que Morrison pronuncia la controvertida línea, sabiendo que habían roto con las normas del programa.

La interpretación fue un símbolo de la libertad artística y del choque entre la contracultura de los años 60 y el establishment conservador de la época.

La vestimenta de Jim Morrison esa noche reflejaba su estilo característico: una camisa de cuero negro y pantalones ajustados, contrastando con la moda más formal que generalmente se esperaba en los programas de televisión de esa época. Morrison, con su actitud desaliñada pero carismática, se mostró desafiante y provocador, lo que añadió más fuerza a la actuación.

En cuanto al sonido, Ray Manzarek en los teclados, Robby Krieger en la guitarra y John Densmore en la batería complementaron a Morrison con su habitual estilo psicodélico y rockero. A pesar de la tensión tras bastidores, The Doors ofrecieron una actuación impecable desde el punto de vista musical, que fue grabada en vivo para el programa.

Impacto y legado:

La actuación de The Doors en el Ed Sullivan Show dejó una huella imborrable en la historia de la televisión y el rock. La banda nunca volvió a tocar en el programa, pero esta prohibición solo reforzó su imagen como rebeldes de la contracultura de los años 60. A largo plazo, la controversia solo añadió a su mística, y Morrison se consolidó como una figura icónica que rompía las barreras impuestas por las normas sociales.

Décadas después, la actuación sigue siendo recordada y revisitada en documentales y películas, como el filme de Oliver Stone sobre The Doors, lanzado en 1991, que recreó esa noche legendaria. Incluso en 1997, cuando se lanzó una caja recopilatoria de la banda, se incluyó una versión bromeada de la introducción de Ed Sullivan, mostrando cómo esa actuación se había convertido en parte de la historia del rock.

La aparición de The Doors en el Ed Sullivan Show no fue solo una actuación musical más. Fue una declaración de principios y un enfrentamiento entre dos visiones opuestas de la sociedad. Mientras Morrison y su banda representaban la libertad y la irreverencia, Sullivan simbolizaba el control y la censura. Esa noche, el rock ganó una pequeña batalla, y The Doors se aseguraron un lugar en la leyenda del rock n' roll.