(Intro)(A capella)
El sátiro de Tungaleja, Tungaleja ataca,
el sátiro de Tungaleja, Tungaleja ataca.
(Estrofa)
¿Cómo puede ser un sátiro ese mamarracho?
Lo que pasa es que acá en Tungaleja faltan machos.
A todas las mujeres, el sátiro tiene muertas,
dicen que son ellas mismas que le abren la puerta
(Estribillo)
Al sátiro de Tungaleja, Tungaleja ataca,
el sátiro de Tungaleja, Tungaleja ataca.
(Estrofa)
Una noche después de abusar de una pendeja,
le dio a una sandía y al hamster de una vieja.
Fornicó a un mongólico católico en la misa
y a una marxista chiflando la marcha socialista.
(Estribillo)
El sátiro de Tungaleja, Tungaleja ataca,
el sátiro de Tungaleja, Tungaleja ataca.
(Estrofa)
Los maridos despechados quisieron lincharlo
pero en el borbollón, el sátiro logró ensartarlos;
en la cárcel taló a varios por entre las rejas,
a un cabo por atrás y a un comisario por la oreja.
(Estribillo)
El sátiro de Tungaleja, Tungaleja ataca,
el sátiro de Tungaleja, Tungaleja ataca.
(Solo)
(Estrofa)
Quisieron cortarle el miembro en la pena de muerte
pero se les partió en cuatro partes el machete;
intentaron liquidarlo entonces de un balazo
pero la bala rebotó en su duro pedazo.
Cuando iban a cortarle el pene con un yunque,
las mujeres temieron que nunca más le funque
(Estribillo)
Al sátiro de Tungaleja, Tungaleja ataca,
el sátiro de Tungaleja, Tungaleja ataca.
(Estrofa)
Y ellas mismas lo salvaron, y tras rescatarlo
se fueron de Tungaleja siguiendo ese falo.
Ahora tienen que entretenerse entre los muchachos,
lo que pasa es que ahora en Tungaleja sobran machos,
porque ahora en Tungaleja somos todos machos.
(Final)
El sátiro de Tungaleja, Tungaleja ataca.