Rara vez,
la campana suena otra vez
alviando tus engaños
sometiéndote al rebaño.
Es tan chico el mundo pienso
inclinándome al exceso
del sentir que ya no hay nada
a un destello en tu mirada.
Patinándome en el miedo
como un telepibe ciego
voy buscando el fuego
y es tu fuego mi calor.
- - (x4)
Tu pecado mi condena
en el shopping de las penas
van tomando el jugo
de este tonto corazón, con razón.
- -
Nunca te quedes quieto!!!
Aún no hay comentarios,
¡escribe el primero!Para hacer una pregunta o dejar un comentario sobre esta canción, debes estar LOGUEADO
Usamos cookies. Leer más