(RECITADO)
El hombre en batalla grita por instintos ancestrales,
y el grito disuelve al miedo, dandole paso al coraje.
Cargaba el indio a lanzasos colgando el grito en el aire,
tendido sobre el malón, como salido de madre.
Las montoneras nativas fueron ... cañon de la sangre,
cual si alumbrara la tierra toda su furia salvaje.
Por eso cuenta la historia singular de los combates,
que cuando el indio gritaba, se hacian pedazos los sables!!!
El cielo estaba en calma
de pronto entropillo los vientos
y un huracán de rabias contenidas
dio forma al entrevero.
Desarraigo tacuaras centenarias
y las tendió en un vuelo
que horizontal se le enanco a los potros
y el casco de los potros se hizo trueno.
Mas que fuerzas en marcha
fueron golpes de viento
sin detenerse nunca
mas feroz, siempre en acecho.
Mas que fuerzas en marcha
fueron golpes de viento
sin detenerse nunca
mas feroz, siempre en acecho.
(RECITADO)
Y el grito bronco que retoza, rebotando en los cerros
se desliza en el monte y se agazapa
retoma la llanura y se hace inmenso.
Amagar, retiradas en desbande, perderse en el silencio
caracolear los potros y de pronto
con empuje infernal, cargar de nuevo!!!
Lanza, facón, sable, trabuco
rugiente el entrevero
y a diente si, a diente se priendian
por el gusto ancestral del cuerpo a cuerpo.
Así nació mi Patria a carga heróica
tan llena de fervor y sentimiento
que fue libre nomás, libre nomás, libre nomas,
solo a golpe de viento y entrevero
que fue libre nomás, libre nomás, libre nomas,
solo a golpe de viento y entrevero.
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