Bio

Este quinteto australiano se formó dos semanas antes de un concurso de bandas de colegio, porque Amandah —la vocalista/guitarrista— quería conseguir el gran premio. Reclutó a un bajista, un baterista, una violinista y una tecladista que apenas conocía, y ganaron.

La segunda canción que escribieron fue la hiperventilada "Just a song about ping pong", una buena muestra de sus rapidísimas e hiperactivas composiciones pop con un toquecito punk. La canción eventualmente los hizo conocidísimos en su país y los llevó a Nueva York a reunirse con los mandamases de un sello. Nada mal para estar en el colegio.

Discografía