Veremos volar gatos de angora a la hora de cenar,
iremos al baile de los malditos por caminos sin asfaltar,
y oiremos cantar sirenas cuando apenas lleguemos al mar,
pero alguien vendrá, alguien vendrá a decirlo,
alguien vendrá a decir que no es verdad.
Alguien me prometió respuestas a la eterna gran cuestión,
después me ató con una cadena a un signo de interrogación,
luego me partió una ceja como premio de consolación.
Dime si alguien vendrá, alguien vendrá a decirlo,
dime si alguien vendrá a decir que no es verdad.
Y dormiremos en campos magnéticos sin dejar de levitar,
pero alguien vendrá, alguien vendrá a decirlo,
alguien vendrá a decir que no es verdad.
El fumador de grifa, la azafata de congresos,
la sota de bastos misma, o tal vez el hombre del tiempo.
Alguien dijo en voz alta que Bo Diddley era Dios,
todos volvimos la cara y aplaudimos con emoción.
Se acortan las distancias entre lo bueno y lo mejor,
pero alguien vendrá, alguien vendrá a decirlo,
alguien vendrá a decir que no es verdad.
y oiremos cantar sirenas cuando apenas lleguemos al mar,
pero alguien vendrá, alguien vendrá a decirlo,
alguien vendrá a decir que no es verdad.
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