Ahí están mis dudas barajadas en la mesa
hay dos sillas puestas pero sólo hay un jugador
También está el amor que aúlla en las noches de tormenta
y el ahorcado, la princesa y el bufón
Ahí están mis penas, están colgadas en la percha
junto a los problemas que encontré ayer en un cajón
También está el hombre que espera las equis de una ecuación
y estampas con siete puñales en un corazón
Vendedores de nostalgia llaman a la puerta
ellos traen la fragancia que nos hizo enloquecer
saben cuál es la distancia entre el siempre, el nunca y el ayer
lo que pudo haber sido pero que no fue
como el humo de una máquina de tren.
Mira, la verdad se está haciendo a fuego lento
sé que la gente le echa azúcar hasta que les sabe bien
A ti y a mí nos gusta cruda, aunque dura de roer
se escapa un sentimiento por debajo del mantel
como el humo de una máquina de tren
Te vi sentada en el trono gris del claroscuro
limpiabas con cerveza manchas del vestido de satén
Escapamos los dos juntos dando pasos de claqué
perdidos en un mundo imposible de entender
como el humo de una máquina de tren.
Aún no hay comentarios,
¡escribe el primero!Para hacer una pregunta o dejar un comentario sobre esta canción, debes estar LOGUEADO
Usamos cookies. Leer más