Memphis La Blusera

Biografia

Adrián Otero Cantante
Emilio Alfano Guitarrista
Alberto García Guitarrista
Daniel Beiserman Bajista
Eduardo Anetta Baterista
Fabián Prado Tecladista
Atilio Villanueva Saxofonista

Memphis la Blusera hereda la tradición de rock & blues de los músicos del Oeste de Buenos Aires, con una carrera que comienza en 1978 y que recién tiene sus primeros hitos en 1981 (teloneros de Pajarito Zaguri en Obras) y 1982 (el festival B.A. Rock). El nombre es un homenaje a Memphis, la ciudad natal de Elvis Presley y epicentro de sellos bluseros. Su debut discográfico es Alma bajo la lluvia, donde estaba el hit “Blues de las 6 y 30”, que logra gran difusión radial, y también “Moscato pizza y fainá”.

Las letras descriptivas y la voz blusera de Adrián Otero se complementan con las guitarras de Eddy Vallejos, León Almará y Rubén King Alfano, el saxo de Emilio Villanueva y la batería de Raúl Lafuente. El sonido es un rock y boogie que lentamente gana más y más fans, aunque los medios de difusión comienzan a darle más espacio al pop. Tal vez por esa razón, buscar modernizar su sonido con Medias negras, y no consiguen convencer a nadie. De hecho, un buen tema como “Montón de nada” recién se descubre como hit muchos años después, en otra versión. Solamente sobresale como hit “La bifurcada”.

La fama del grupo se consolida tocando sin cesar por pubs y clubes de Buenos Aires. Llenan el teatro Astros y el Presidente Alvear, ya sin León Almará y con Eduardo Anetta como nuevo baterista. Con Tonto Rompecabezas, el trabajo intenso de tantos años comienza a dar sus frutos: filman un video con Pino Solanas, llenan el teatro Fénix de Flores, tocan por el interior de país y cambian de sello en plena hiperinflación, pasando de una multinacional a una ascendente independiente.

En 1991, ya con Alberto García en guitarra, consiguen otro hit (“Perro llorón”) y se ubican a la cabeza del revival por el blues y el rock and roll. La consagración masiva llega en 1993, cuando llenan Obras, y al año siguiente el Gran Rex, donde graban un disco en vivo muy vendedor, que hace que el tema “Montón de nada” suene en todas las radios. Son disco de Oro, acceden a la televisión y llenan el teatro Broadway, el Gran Rex y el estadio Obras en varias oportunidades. Se va King Alfano y entra el tecladista Fabián Prado.

1995 es uno de su mejores años, con llenos totales y giras nacionales que desembocan en el festejo de su aniversario 18 en Obras. Anualmente vuelven a celebrar sus cumpleaños y la costumbre es un punto de encuentro para sus fans. En el 2001 vuelven a integrar el elenco de una compañía multinacional y editan Angelitos culones, que los revitaliza.

Después aceptan integrar un proyecto para tocar con orquesta en el teatro Colón y en noviembre del 2002 festejan sus 25 años de carrera con la grabación en el Luna Park de un álbum doble en vivo. Su última producción discográfica fue …Etc, editada en el 2005.